La Comisión Directiva de la Seccional Un.T.E.R Roca -Fiske rechaza las declaraciones de la Ministra de Educación y Derechos Humanos, Licenciada Mónica Silva en relación a su afirmación, expresada en diversos medios y canales oficiales, con respecto a la aceptación de la implementación de la ESRN en la ciudad de General Roca.
Tal afirmación niega la realidad de nuestra localidad. En la última jornada institucional los establecimientos educativos del nivel secundario han rechazado la implementación de la reforma en el año 2017, por considerarla inviable en las condiciones que se encuentran los edificios educativos y ante el proyecto mismo, cuya estructura de cargos docentes reduce aproximadamente en un 50 % la planta laboral docente por escuelas. Es un dato alarmante el cual determina que muchos compañeros y compañeras queden sin trabajo.
Asimismo se observan diferencias con el gobierno en relación a los lineamientos pedagógicos y de organización institucional que dan sustento a esta nueva escuela secundaria. Todo a un elevado costo laboral y pedagógico al recargar y flexibilizar la tarea docente, por no definir el turno laboral del cargo, y vaciar la propuesta pedagógica de contenidos al garantizarle demagógicamente a los padres y estudiantes la no repitencia; una suerte de promoción automática detrás del discurso de las trayectorias escolares.
Por estas razones las comunidades educativas avalan el posicionamiento de nuestra Organización. Lo mismo puede decirse del Honorable Concejo Deliberante de General Roca, el cual le solicita a la Sra. Ministra que habilite los espacios de discusión con los Centros de Estudiantes, los docentes y los padres. Espacios que han sido pedidos y fueron negados por el Gobierno Provincial, el cual no acepta discusión ni corrección alguna.
Por otra parte, rechazamos la implementación en algunas escuelas. Apostamos a que la misma sea en el marco de los 93 establecimientos educativos de la Provincia para que tenga el efecto esperado; que todas ellas se encuadren bajo un único Proyecto Curricular, logrando de esta manera una real reforma educativa.
No podemos permitir que nuevamente se fragmente el nivel de la educación secundaria.
Creemos que es imperiosa la necesidad de una reforma educativa, como también sostenemos que ésta debe hacerse con la mayor seriedad posible, teniendo en cuenta y respetando a todos los actores involucrados. Ésto garantizará la real apropiación de los cambios, a través de espacios de debate y construcción como así también un verdadero perfeccionamiento presencial de todos los docentes.