POSICIÓN PROVINCIAL DE UNTER
UnTER reafirma su fuerte rechazo al avance de la frontera hidrocarburífera en zonas productivas del valle del Río Negro. Nos oponemos en particular a la explotación de hidrocarburos no convencionales en toda la provincia, para cuya extracción se utiliza la “hidrofractura” o “fracking”, técnica que utiliza gran cantidad de agua, que destruye y contamina suelo, agua y aire.
Hace más de tres años nuestra organización trabaja en actividades de difusión, debate y formación sobre ésta política extractivista, no solo a nivel provincial sino también desde distintas seccionales de UnTER, como las de Allen, Gral. Roca–Fiske Menuco, Valle Medio, Villa Regina, entre otras, donde se crearon los departamentos socioambientales locales.
Vale recordar que en muchos lugares del mundo el fracking está prohibido o en moratoria por los riesgos socioambientales que conlleva. En muchos municipios de nuestro país y de nuestra provincia se han aprobado ordenanzas que lo prohíben y, día a día, crece la oposición y resistencia de las comunidades locales.
Lamentablemente no necesitamos ir muy lejos para comprobar el daño del fracking sobre los territorios y comunidades. Lo vemos en primera persona en la vecina provincia de Neuquén, y también en Allen. En esta última, se implementó el fracking en el 2012 y ya se encuentran claras muestras de daño ecológico, social y económico: denuncias reiteradas por derrames, incendios, temblores, afecciones respiratorias, contaminación de agua, pérdida de tierras productivas, aumento de carpocapsa, destrucción de producción local. En un contexto de fuerte oposición de gran parte de la población, el gobierno presionó para lograr la anulación de una ordenanza municipal que prohibía el fracking en Allen.
Algo similar ocurrió en Cinco Saltos ante la decisión anticipada del Concejo Municipal de prohibir esta práctica, la autoridad municipal fue obligada a anular la ordenanza en 2013. Queda demostrado que el poder económico y los intereses de las empresas no permiten que la democracia funcione ni mucho menos, que en el lugar de profundos intereses aparezca un Municipio diciendo no al fracking.Hemos denunciado también discursos tendenciosos y diversas estrategias por parte de gobierno, medios de comunicación o empresas petroleras para intentar el “consenso social” para la expansión hidrocarburífera y el desarrollo de no convencionales en la provincia. Creemos que hay suficientes evidencias que ameritan aplicar el Principio Precautorio consagrado en nuestra legislación ambiental y prohibir el desarrollo del Fracking en toda la provincia. Creemos que es necesario diversificar la matriz energética, priorizando el desarrollo de fuentes renovables en lugar de continuar reforzando y favoreciendo la expansión de hidrocarburos, sean estos convencionales o no convencionales. Es imprescindible adoptar una visión integral de las cuencas, cuanto más cuando tanto la cuenca del Río Negro como la del Río Colorado muestran graves signos de deterioro.
Creemos en la democracia, creemos en la fuerza participante de las organizaciones sindicales y sociales. Se deben propiciar procesos transparentes y genuinos de participación en los que la voz de los distintos actores sociales sea escuchada y tenida en cuenta a la hora de tomar decisiones, al observar que este tipo de proyectos puede poner en riesgo la salud socio ambiental y de las generaciones presentes y futuras. Nos oponemos firmemente a la explotación de hidrocarburos en zonas productivas del Valle Medio del Río Negro, por lo que rechazamos el Decreto 349/16 que otorga en concesión el área denominada “Chelforó”.